martes, 24 de enero de 2012

-Nosotros

Un amanecer en una mañana de invierno,
frío pero cálido,
cercano pero ausente...
Nos buscamos a ciegas,
y terminamos encontrándonos siempre.
Da igual lo que pase amor,
allí donde tienda mi mano sé que estará la tuya para agarrarla,
allí donde ponga un beso tendré tus labios esperándolo,
y allí donde me tienda estará tu cuerpo para sostener el mio...
Dos almas afines,
dos espíritus perdidos,
dos desgraciados con suerte.
Las paradojas aumentan con los días.
También la necesidad de tenerte.
Seguir mi corazón?
Eso sería demasiado sencillo.
Por primera vez pienso con la cabeza,
pienso las cosas antes de hacerlas,
no actúo por instintos,
y eso me disgusta.
Me disgusta exageradamente.
Si hay algo que nos separa,
si hay algo por lo que no estar juntos,
es por ser lógica,
por pensar demasiado,
por sentir poco.
Por miedo a la felicidad.
Te prometo amor,
que este camino tiene salida,
que algún día dejaremos de darnos golpes contra los muros,
de darnos golpes contra la vida.
Te hago una promesa de felicidad,
de despertarme a tu lado,
de acostarme contigo.
De sonrisas de complicidad,
de miradas que expresan lo que sentimos,
de un amor tan puro como tu música,
de un amor que siempre va a existir,
de una llama que nunca se apaga.
La espera se me hace eterna,
necesito tenerte ya aquí,
pero cuando lo haga quiero que sea para siempre.
No podría perderte de nuevo,
no podría volver a hacerte daño,
ni podría volver a decirte adiós.
Y cuando llegue ese momento,
las notas de tu guitarra se fundirán para siempre con los versos de mis venas...
los latidos de tu corazón seguirán para siempre el compás de los del mío...
y mi mirada ausente ya nunca más estará perdida...

_

Lo más complicado de escribir,
sin duda,
es encontrar una banda sonora acorde con el momento,
acorde con mi estado mental,
acorde con mi locura.
Estos días nublados que tengo,
este estallido de emociones...
Con pianos de fondo parece que son mis dedos,
los que al escribir,
teclean no en el ordenador,
si no en un piano.
Y todo sale a la perfección,
cada tecla va donde tiene que ir,
y cada palabra,
y cada sentimiento.
Noto una calma que me alarma,
una calma que incita a la locura.
Inestabilidades variadas,
ojos que miran pero no ven,
oídos que escuchan pero no oyen,
mente que piensa pero no recuerda...
Me asomo al balcón de mi alma.
El precipicio es tan grande que no veo donde acaba,
pero me da igual,
salto,
caigo,
y allí está todo,
todo mi ser,
todo mi yo.
Y allí exactamente es donde puedo vivir en paz,
sin preocupaciones,
sin más excesos,
sin más inquietud,
sin más dilaciones...

lunes, 23 de enero de 2012

A.

Hacía más de un año que no veía esos ojos,
más bien hacía más de un año que no sentía esa mirada.
Hacía mucho tiempo que no me sentía tan protegida,
y a la vez hacía mucho tiempo que no me sentía tan vulnerable.
Abrí la puerta, y simplemente allí esta Él,
el amor de mi vida, el que siempre supe que era,
pero que disfracé de mentiras para intentar olvidarme de la verdad.
Necesitaba abrazarle, besarle...
Pero los dos estábamos demasiado nerviosos.
El te quiero salió primero de su boca, pero prosiguió con una avalancha de ellos que me hicieron trizas...
Y que a la vez me hicieron volver a vivir de nuevo,
volver a creer,
darme cuenta de que nunca dejé de amar.
Las cosas son sencillas, pero yo siempre tengo que hacerlas complicadas.
No puedo ver sus labios sin desear besarlos...
Y esos besos de domingo gris,
bajo edificios grises, y siendo grises ambos,
puede que me aproximasen más al negro,
a aceptar la verdad,
a aceptar que lo amo más que a nada.
Simplemente soy estúpida, y una mujer demasiado desequilibrada.
Tengo lo que quiero al alcance de mi mano,
pero me cuesta demasiado estirar el brazo.
Creo que por primera vez tengo miedo...
tengo demasiado miedo mi amor...

lunes, 16 de enero de 2012

Carretera perdida

- ¿Tienen cámara de vídeo?
- No, Fred las odia
- Me gusta recordar las cosas a mi manera
- ¿Qué quiere decir?
- Las recuerdo a mi modo, no necesariamente como hayan pasado.

Creo sinceramente que existen dos tipos de personas en el mundo.
Aquellos que necesitan ver vídeos, y que les gustan las cosas como son, todo planificado, la realidad en la cara y las cartas sobre la mesa.
Después estamos los segundos... aquellos que nos guiamos por instinto, los que cometemos más errores y los que más nos arriesgamos.
Los que nunca dejamos de intentarlo, aunque sepamos que acabará mal, porque la esperanza de que puede salir bien es la que nos guía.
Y la verdad, me gusta ser una soñadora, y levantarme cada día con la esperanza de que hoy, puede que vuelva a volar, como hacía cuando era niña.
La realidad es algo que intento evitar, no me gusta pensar que todo es tal y como lo veo.
Pensar que hay algo escondido detrás es lo que hace interesante la vida, pensar que nada es lo que parece.
Pensar que nunca son malos tiempos para los soñadores, al fin y al cabo, somos los únicos que realmente vivimos.
Los únicos que explotamos cada segundo.

lunes, 9 de enero de 2012

Últimamente fumo mucho, duermo poco, y pienso demasiado.
Últimamente le doy demasiadas vueltas a las cosas.
Me pongo filosófica hacia las 3 de la mañana y no hay manera de conciliar el sueño.
Veo el dormir una pérdida de tiempo, desaprovechar la vida.
Pero qué es mi vida si no un desaprovechamiento continuo y absoluto?
No hay bases ni reglas,
ni patrones de conducta.
No hay día ni noche, hace mucho que son solo uno.
Las horas pasan a veces muy rápido, y otras jodidamente lentas.
Y la gente va y viene.
A su puto antojo.
Ya nadie llama a la puerta antes de entrar.
Ya nadie respeta mi espacio.
Ahogarse en una botella de oxígeno,
perderse en un mapa,
jugar a ser pequeño de nuevo,
o jugar a no haber sido nunca mayor.
Evitar responsabilidades que no tienes,
y levantarte con mil opciones y a la vez ninguna.
Dos personas viven en mi y no se cual es la que mejor me cae,
no sé a cuál hacerle caso,
solo sé que día tras día me vuelvo más hipócrita,
y mucho más hija de puta.
Pero eso a quién le importa?
Realmente la mayoría de la gente es así.
Intentáis convertirme en uno de los vuestros, pero no dejaré que lo hagáis.
Jodidos parásitos infernales,
esta vez yo os chuparé la sangre a vosotros,
hasta dejaros sin ella,
hasta consumiros en la miseria que vosotros mismos habéis creado.
Y dejaros más vacíos de lo que estáis.
Habéis hecho salir a la zorra que llevo dentro,
y pienso joderos a todos.

miércoles, 4 de enero de 2012

Recuerdas...?

Este es el último aliento de mi corazón,
mis últimas letras escritas con él, mis últimas palabras.
Mientras se resquebraja, en silencio,
noto las gotas caer, sangre y lágrimas formando un solo cuerpo.
Una sola unión.
Lo sentimental se ha acabado para mi,
duele demasiado, y llevo demasiadas cargas tras de mi...
Los recuerdos bellos, aquellos de los que hablábamos,
recuerdas?
Las tardes de sofá, las tardes de acariciar tu pelo,
las tardes de inundarme de música mientras dormías,
mientras te sentía.
Recuerdas?
Los desayunos, las bromas, los capuccinos...
Nuestros secretos.
Recuerdas? lo recuerdas?
Los te quieros, los te necesito, los siempre estaré aquí,
los nunca me iré.
Las mentiras.
No guardo recuerdos amargos amor,
intento amargarlos para que no me consuman.
Hoy he bajado a nuestro mundo,
he bajado a l`arc en ciel,
pero no quedaba nada.
Solo mis cosas, cubiertas de polvo y dolor,
cubiertas de sentimientos equivocados,
cubiertas de los restos de amor que allí quedaban.
Me he sentado si, y he tomado el aire que necesitaba para escribir esto.
Esto en sí, son las fuerzas que me quedan.
Es mi aliento de muerte.
Mi separación del mundo sensible a la oscuridad en la que siempre he estado.
Creo ver brillar una luz al final,
pero no se si eres tú, o simplemente es mi deseo de que estés ahí.
De que me vuelvas a tender tu mano,
de que volvamos a ser uno.
Yo nunca daba besos,
recuerdas?
no abrazaba, no sentía, no quería sentir.
Y lo peor mi amor,
es que no se si me arrepiento de todo esto.
Recuerdas?
Recuerdas cuando mi alma aun estaba dentro de la tuya?
La tuya sigue dentro de la mía, incrustada, encajada,
y no soy capaz de dejarla salir.
Recuerda todo esto si algún día decides que la mía vuelva a entrar.
Lo curioso de todo es esta carta a nadie,
porque esto mi amor,
todo esto que soy yo,
sospecho que jamás lo verás...
Recuérdame... sobre todo recuérdame...
Recuérdame como algo que pudo ser y no fue...
Como algo que puede ser y no quieres que sea.

martes, 3 de enero de 2012

Únete de nuevo a mi.

La unión hace la fuerza, los polos opuestos se atraen.
Tú y yo, solos frente al mundo,
otra vez.
Nos necesitamos, nos atraemos.
No lo niegues amor, no luches contra tu corazón.
No dejes que tu incesante lógica te consuma.
Deja que te abrace, déjate querer.
Deja que te bese.
Ven a mi,
o vuelve.
Porque en el fondo de mi no acepto que alguna vez te hayas ido...